Los 3 poderes que Mental Power utiliza para poder reprogramar tu mente con éxito son: SUBCONSCIENTE – CONSCIENTE – ACCIÓN
SUBCONSCIENTE
Mediante la tecnología este poder facilita la autosugestión mediante la repetición sistemática de afirmaciones y visualizaciones, es decir, de frases e imágenes mentales que describan tu objetivo en su estado alcanzado. Progresivamente tu estructura neuronal se irá modificando para guardar tu nueva programación grabándola así en tu mente subconsciente.
Además de sentirte mejor que nunca, lo anterior logrará que tu realidad vaya convirtiéndose en el maravilloso jardín que anhelas o que en la película de tu vida por fin se comiencen a proyectar las escenas que tanto deseas.
CONSCIENTE
Recordando un ejemplo anterior, la reproducción de afirmaciones de Subconsciente es como enterrar las semillas correctas en la tierra, es decir, en la mente subconsciente, pero ten en cuenta que si el resto de la jornada mantienes tu mente consciente (es decir al jardinero) en exactamente lo opuesto será equivalente a volver a desenterrar del suelo las semillas que plantaste.
Consciente genera dos beneficios fundamentales:
1º) Cuidar y regar durante el resto del día las semillas plantadas con la reproducción de afirmaciones, para que estas germinen, crezcan y puedas finalmente aprovechar sus frutos.
2º) Ser más eficiente y disfrutar más de cada actividad.
Ambos beneficios se consiguen facilitando, mediante la tecnología, la selección e incorporación de los hábitos de atención y concentración, bloqueo de pensamientos negativos y mejora de percepción.
ACCIÓN
La reproducción de afirmaciones para la reprogramación del subconsciente y el Consciente te impulsarán a incorporar nuevos y mejores hábitos. Imagina tus logros si además pudieras contar con una herramienta que te organice, te motive y constantemente te ayude a adquirir la disciplina que se requiere para garantizar y hacer realidad todos tus deseos.
El tercer poder utiliza la tecnología para hacer posible esta herramienta, convirtiendo tus deseos en objetivos, fijando un plazo para cumplirlos y poniendo a tu disposición recordatorios para que puedas hacer el seguimiento autoevaluándote o pidiendo a personas cercanas a ti que te evalúen, esto último incrementará aún más tu compromiso y consecuentemente tus probabilidades de éxito.